General Martínez Campos
El general Martínez Campos nació en Segovia en 1831 y murió en Zaruz en 1900. Impotante militar español del siglo XIX por participar en numerosas contiendas como la Guerra de cuba de 1868-1878, la guerra de México o la última guerra Calista que se produjo tras la disolución de la I República y restauración de la monarquía con Alfonso XII, que este general apoyó e impulsó. Ostentó entre otros cargos Ministro de Guerra con Sagasta, fundador de la Academia General Militar e incluso gobernador de Cataluña con la I República.
Martinez Campos tiene una escultura en su honor por haber participado en la Primera Guerra de África, situada en el Parque del buen Retiro en Madrid. Durante años ciudades del norte de Marruecos como Ceuta o Melilla eran atacadas por guerrilleros del Rift, por lo que el gobierno liberal de Isabel II estableció una serie de medidas para que dejasen de producirse estos ataques pactando con el Sultanato de ese país. Esta guerra empezó por el incumplimiento de esos pactos entre los países cuando los guerrilleros africanos atacaron la cuidad de Ceuta, obligando a España a declarar la guerra a Marruecos, la cual ganaron los españoles en tan solo un año (1859-1860) imponiendo duras sanciones al país vencido. Esta guerra plantó la semilla de la creación del protectorado de Marruecos años más tarde repartido entre Francia y España, además de que exaltó los valores y el patriotismo de España. Por ello, un senador español propuso la construcción de un monumento dedicado a este militar con el objetivo de representar y exaltar los valores naciones de la patria española a principios del siglo XIX.
Martinez Campos tiene una escultura en su honor por haber participado en la Primera Guerra de África, situada en el Parque del buen Retiro en Madrid. Durante años ciudades del norte de Marruecos como Ceuta o Melilla eran atacadas por guerrilleros del Rift, por lo que el gobierno liberal de Isabel II estableció una serie de medidas para que dejasen de producirse estos ataques pactando con el Sultanato de ese país. Esta guerra empezó por el incumplimiento de esos pactos entre los países cuando los guerrilleros africanos atacaron la cuidad de Ceuta, obligando a España a declarar la guerra a Marruecos, la cual ganaron los españoles en tan solo un año (1859-1860) imponiendo duras sanciones al país vencido. Esta guerra plantó la semilla de la creación del protectorado de Marruecos años más tarde repartido entre Francia y España, además de que exaltó los valores y el patriotismo de España. Por ello, un senador español propuso la construcción de un monumento dedicado a este militar con el objetivo de representar y exaltar los valores naciones de la patria española a principios del siglo XIX.
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